¡Estás de enhorabuena! Por fin vas a tener una guía para conocer la técnica del paddle surf. Si estás iniciándote, no te preocupes ya que vamos a desarrollar todos los secretos de manera progresiva y con la intención de que todos obtengamos lo máximos de estos trucos y consejos.
Técnica de remada
La técnica de remada es algo que nunca dejarás de mejorar y pulir. Durante las primeras sesiones mantendrás una posición más erguida, estarás muy pendiente del equilibrio y los de tus brazos serán la única parte del cuerpo que uses para remar. Te recomendamos que flexiones ligeramente las rodillas y mantengas siempre la mirada al frente. Poco a poco, irás mejorando lo que te permitirá eliminar tensión muscular por el equilibrio y realizar una dinámica más consciente y eficiente.
5 principios básicos para remar eficientemente
La constitución de cada rider es diferente, por lo tanto no todos vamos a remar igual ni existe una técnica definida y cerrada. Además, la altura de tu remo modifica la forma en la que se aplica la fuerza. Por si fuera poco, cada tabla tiene unas características hidrodinámicas distintas a las que le van mejor un tipo de técnica. Pese a ello, como explica Larry Cain, todos los palistas experimentados suelen coincidir en varios aspectos fundamentales:
- El primer principio se basa en introducir el remo en una posición adelantada respecto a nuestro cuerpo y cargar el remo de agua en la parte trasera de la pala. Una vez consigamos esto, podemos hacer avanzar nuestro cuerpo hasta la posición en la que se encuentra la pala.
- El segundo fundamento consiste en utilizar preferentemente los músculos grandes sobre los pequeños. Esto es, debemos asegurarnos que cargamos la fuerza sobre nuestro core, los pectorales, los glúteos y los femorales, y no en los músculos de nuestros brazos, como los bíceps, los tríceps o los antebrazos.
- El tercer punto a tener en cuenta es aprovechar al máximo la fase en la que la pala se encuentra con un ángulo positivo. Cuando la pala entra en el agua enfrente de nosotros tiene un ángulo positivo, entendiendo que el agua cargada en su parte posterior ejerce una fuerza de reacción sobre el remo que nos impulsa hacia arriba. Esta fase debería terminar aproximadamente cuando la pértiga del remo a pasado muy ligeramente una posición vertical. Un error muy común es alargar esta fase demasiado e incluso hacer un último esfuerzo al final cuando la pala ya se encuentra con un ángulo negativo. Este error provoca que ejerzamos una fuerza que hunde nuestra tabla dentro del agua.
- El cuarto fundamento implica la idea de sacar el peso de nuestro cuerpo fuera de la tabla y cargarlo sobre el remo. Esto conlleva la liberación de peso en la tabla, lo que facilita su deslizamiento, a la vez que permite utilizar el peso de nuestro cuerpo para cargarlo sobre el remo e impulsarnos.
- El quinto y último principio es intentar mantener nuestra tabla lo más estable y con un movimiento fluido sobre el agua. Esto se consigue evitando movimientos bruscos, especialmente entre cada palada.
Mantener o cambiar de dirección
Para mantener la dirección de la tabla y un rumbo constante es necesario mantener un equilibrio entre el número paladas por cada uno de los lados. En ocasiones esto no es suficiente, o intencionadamente buscamos seguir una cierta trayectoria curva. Para ello, deberemos aplicar distintas técnicas que nos ayuden a conseguirlo.
- La más intuitiva es romper el balance entre número de paladas por cada lado, y aumentar el número por el lado contrario al que queremos girarprograsivamente.
- La segunda de ellas es el repaleo, que consiste en girar la pala durante parte de su recorrido en el agua para ejercer una fuerza lateral. La forma más sencilla y efectiva de aplicar esta técnica consiste en, por el lado contrario al que queremos dirigirnos o corregir el rumbo, abriremos la parte posterior de la pala hacia el exterior durante su última fase en el agua. Pongamos el ejemplo de que queremos virar a la izquierda, entonces tras clavar el remo enfrente de nosotros por el lado derecho y avanzar, cuando el remo se encuentra cercano a la altura de nuestros pies abriremos la pala hacia el exterior como si quisiéramos alejar con la parte posterior de la pala un objeto que se encuentra en el agua y cercano a nuestra tabla.
- La otra opción para seguir un trayectoria curva es utilizando el peso de nuestro cuerpo. Si comenzamos a ejercer más presión sobre la tabla con un pie que con el otro, la tabla girará hacia el lado contrario del pie que está ejerciendo mayor presión.
Virages cerrados, giros de boyas y ciabogas
Para realizar giros cerrados o la maniobra de ciaboga existen dos técnicas principales.
- La más sencilla se consigue moviéndose hacia la parte trasera de la tabla. La posición adecuada es aquella en la que nuestro peso se sitúe sobre la quilla y se levante muy ligeramente la proa de nuestra tabla. Una vez en esta posición, introduciremos la pala en el agua por el lado hacia el lado tenemos intención de virar. Podemos comenzar por introducir la pala de forma paralela al canto de nuestra tabla y progresivamente girarla a modo de aleta o timón. Una vez hemos realizado parte del giro o nos quedamos sin velocidad, cambiaremos de lado la pala para remar al exterior. Una forma inteligente de hacer este paso es introducir la pala lo antes posible en lado exterior y dar la primera palada al mismo tiempo que terminamos la rotación.
- La otra opción consiste en desplazarnos de igual manera hacia la popa de la tabla pero esta vez colocando un pie delantero y otro trasero. El pie de delante coincidirá con el lado del virage, es decir si giramos alrededor de una boya le estaríamos dándole la espalda a la misma. Con esta posición de los pies, trataremos de realizar una o varias remadas en semicírculos por el lado exterior al virage. Durante las paladas trataremos de separar lo máximo posible la pala de nuestra tabla, al mismo tiempo que rotamos nuestra mirada y nuestros hombros hacia la dirección en la que queremos terminar el viraje.